El pasado jueves 10 de abril se realizó el taller demostrativo sobre el funcionamiento de una granja de insectos para el Grupo Operativo Livlab-In en Milagro (Navarra), en las instalaciones del socio colaborador ISONATUR. En este encuentro con socios y otros interesados en la insecticultura se pudo ver de forma práctica el potencial de los insectos en la revalorización y transformación de residuos agroalimentarios en nuevos productos de valor.




Para comenzar con el evento Eurecat presentó el proyecto y las últimas novedades a los asistentes. A continuación, Proteinsecta enseñó la importancia del Tenebrio molitor y otros Tenebriónidos en la insecticultura y su papel en la economía circular e ISONATUR mostró como la Mosca Soldado Negra puede ser una herramienta innovadora y sostenible en la cadena alimentaria. Para finalizar el evento los participantes al taller tuvieron la oportunidad de realizar una visita por la planta piloto de TRASA donde trabajan con la especie Hermetia illucens o Mosca Soldado Negra.
Tal y como se pudo demostrar de forma práctica en el taller, los insectos son una solución sostenible e innovadora al desafío de la gestión de residuos de la cadena alimentaria. Con este proceso de bioconversión de desperdicios alimentarios se obtendrán nuevos productos de alto valor (como comida animal, biofertilizantes o biomateriales), a la vez que se crea un impacto positivo a nivel social, económico y ambiental.
Revolucionando la industria agroalimetaria con insectos

Go Livlab-In es un proyecto que impulsa la innovación en la agricultura circular y busca transformar la agricultura y la agroindustria mediante la insecticultura. Mediante la bioconversión de residuos alimentarios a través de los insectos, pretende crear nuevos productos de alto valor reduciendo el impacto ambiental de toda la cadena alimentaria.
Esta iniciativa también tiene como objetivos, revitalizar el empleo en zonas rurales, reducir las emisiones de efecto invernadero y mejorar la competitividad y la resiliencia del sector agroalimentario a partir de un mejor aprovechamiento de sus propios subproductos y desperdicios.
El proyecto está cofinanciado por la Unión Europea al 80% con fondos FEADER y por el MAPA al 20% con fondos AGE. Cuenta con la colaboración de Artica+i, Eurecat, ISONATUR, ASAJA, Proteinsecta e Ideagro.